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En ECYE estamos muy interesados en poder proporcionar todo tipo de producto para sus maniobras de levante, movimiento, traslado y amarre de carga
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En ECYE; somos una empresa dedicada en la comercialización de productos de izaje y cables de acero, teniendo un firme compromiso con la calidad, la seguridad y la eficiencia en cada uno de nuestros procesos. Sabemos que cada proyecto no solo requiere de materiales confiables, sino de un proveedor que responda con seriedad, conocimiento técnico y compromiso. Por eso, trabajamos con marcas reconocidas, productos certificados y un equipo capacitado para brindar un servicio de calidad.
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Aquí encontrarás las respuestas a las preguntas más frecuentes entre los clientes
Seguridad
La seguridad en las maniobras de izaje es esencial, pues un mínimo descuido puede traducirse en graves consecuencias humanas y materiales. Cuando estas operaciones se realizan en terrenos con desnivel, el riesgo se multiplica, exigiendo una preparación aún más rigurosa. Evaluar el terreno, nivelar adecuadamente los equipos y aplicar estrictamente las normas de seguridad no es solo recomendable, sino vital. En estos escenarios, precisión y previsión se convierten en los pilares de una operación segura y eficiente.
Izar cargas implica una serie de riesgos críticos que pueden comprometer tanto la seguridad del personal como la integridad de la infraestructura. Entre los peligros más frecuentes se encuentran la caída de cargas por mala estiba, la sobrecarga de equipos, el balanceo incontrolado, lesiones por vibración y una manipulación inadecuada. Estos riesgos, si no se gestionan adecuadamente, pueden generar daños graves e incluso pérdidas humanas.
Mitigar estos peligros exige una cultura preventiva: respetar los límites de carga, asegurar una correcta distribución, verificar el estado de los sistemas de freno y utilizar los elementos de sujeción adecuados. La seguridad en el izaje no es una opción, es una responsabilidad compartida.
Inspección visual detallada
Identificar desgaste, corrosión, cortes, deformaciones o cualquier tipo de daño visible.
Verificación dimensional
Medir diámetros para detectar reducciones que comprometan la resistencia del equipo.
Certificados y marcas de conformidad
Asegurar que cada elemento cuente con su documentación y marcaje según normas técnicas.
Comprobación del funcionamiento de accesorios
Revisar que ganchos, grilletes, anillas y otros elementos móviles operen correctamente y sin fallas.
Frecuencia de inspección
- Inspección visual: Mensual
- Inspección dimensional: Cada seis meses
Mantener registros actualizados de cada revisión.
Retiro inmediato del servicio
Si se detecta cualquier daño o anomalía, el equipo debe ser retirado y sustituido sin excepción.
Carga Estática
- Permanece constante en el tiempo.
- No varía su magnitud, dirección ni ubicación.
- Ejemplos: peso propio de una estructura, mobiliario fijo.
- Actúa de forma gradual, sin generar vibraciones ni impactos.
Carga Dinámica
- Se presenta de forma repentina o intermitente.
- Sus características pueden cambiar rápidamente, incluso durante el mismo evento.
- Genera vibraciones, sacudidas e impactos en las estructuras.
- Ejemplos: viento fuerte, sismos, maquinaria en movimiento, impacto de cargas móviles.
Diferencias principales
Dinámica: Variable, impredecible y con efectos más agresivos sobre las estructuras.
Estática: Constante y predecible.
Durante el izaje, si una carga se desvía o se balancea, es crucial detener la operación de inmediato para prevenir accidentes. Antes de continuar, debe verificarse que la carga tenga espacio libre para moverse con seguridad y no esté en contacto con objetos que puedan desviar su trayectoria.
Se recomienda elevarla ligeramente para comprobar su estabilidad. Si hay restricciones o bloqueos, deben identificarse y eliminarse antes de reanudar la maniobra. La seguridad comienza con el control total del entorno.
Preguntas generales
El equipo de izaje comprende la maquinaria y los accesorios utilizados para levantar, mover y posicionar cargas pesadas de forma segura y eficiente. Entre ellos destacan grúas móviles, torres, telescópicas, polipastos, así como elementos complementarios como eslingas, ganchos y grilletes.
Estos equipos son esenciales en sectores como la construcción, la industria pesada y la logística. Su uso correcto requiere una planificación precisa a través de un plan de izaje, el cual detalla procedimientos, equipos y medidas de seguridad para prevenir riesgos.
En toda operación de izaje, la seguridad comienza con una buena preparación y el uso adecuado de los equipos.
La Carga Límite de Trabajo (CLT), o Working Load Limit (WLL), es la carga máxima que puede aplicarse de forma segura a un equipo de sujeción —como eslingas, cadenas o barras— bajo condiciones normales de operación.
Esta capacidad está diseñada con amplios márgenes de seguridad, ya que se calcula dividiendo la resistencia a la rotura (MBL) entre un factor de seguridad (SF). El WLL debe ser, como mínimo, el doble del peso del objeto a mover, lo que garantiza la integridad del equipo y la protección del personal.
En resumen, el WLL representa el límite confiable del equipo, no su capacidad extrema.
La carga de prueba es un tipo de carga utilizada para verificar la capacidad y seguridad de los equipos y procedimientos antes de realizar un izaje real. Su propósito es asegurar que todos los equipos funcionen correctamente y que se cumplan las normas de seguridad necesarias. Este paso es esencial para confirmar que el sistema de izaje es seguro y eficiente antes de proceder con la carga real.
La resistencia a la tracción (o tensión, BF) es un valor fundamental para evaluar la capacidad de un material para resistir fuerzas de tracción sin sufrir deformaciones permanentes o fracturas. En operaciones de izaje, es crucial conocer esta propiedad de los materiales empleados, como eslingas, cables de acero y ganchos, para asegurar que soporten las cargas de manera segura.
Se mide en megapascales (MPa) o newtons por milímetro cuadrado (N/mm²), y se calcula dividiendo la fuerza máxima de tracción (Fm) por el área de sección (S0) de la probeta utilizada en el ensayo.
La resistencia a la tracción garantiza que los equipos de izaje mantengan su integridad durante las operaciones, evitando accidentes o fallos estructurales.
El Factor de Seguridad (SF) es una medida esencial en el izaje que indica el margen de seguridad de un equipo o estructura frente a las cargas a las que será sometido. Se calcula dividiendo la carga de rotura del elemento entre la carga de trabajo a la que se enfrentará durante las operaciones.
Este factor es crucial para garantizar que los equipos, como grúas y cables, puedan soportar las cargas de manera segura, evitando fallos estructurales y accidentes. En el diseño de equipos de elevación, el SF se calcula matemáticamente o mediante pruebas hasta que el equipo falle, determinando así su carga máxima segura.
El ángulo de uso de una eslinga durante el izaje tiene un impacto directo en su capacidad de carga. Cuando la eslinga se utiliza en un ángulo, la carga se distribuye entre los ramales, reduciendo la capacidad de carga de cada uno. Por ejemplo, si una eslinga tiene una capacidad máxima de 2.000 kg y se usa con una elevación estrangulada, la capacidad se reduce a 1.600 kg.
El ángulo entre los ramales también es clave: un ángulo más agudo disminuye la capacidad de carga debido a las fuerzas adicionales que se generan. Para calcular la capacidad de carga, se multiplica el peso de la carga por un coeficiente correspondiente al ángulo y se divide entre el número de ramales.
Por ejemplo, con una carga de 1.000 kg y un ángulo de 60 grados con dos ramales, cada eslinga soportaría 580 kg. Un ángulo de 30° puede reducir la capacidad de carga hasta en un 50%.
Para seleccionar el equipo de izaje adecuado, es fundamental considerar varios aspectos clave para garantizar un izaje seguro y eficiente:
Puntos de Anclaje y Planificación de la Operación: Conocer los puntos de anclaje de la carga y coordinar con el equipo sobre el tiempo de operación y el número de ciclos necesarios para el proyecto.
Peso de la Carga: Es crucial conocer con precisión el peso de la carga a izar. Nunca se debe forzar la capacidad máxima del equipo. Por ejemplo, si la carga supera ligeramente las 3 toneladas, se recomienda usar un equipo con capacidad de 4 toneladas para asegurar un transporte seguro.
Entorno de Trabajo: El equipo debe ser adecuado para operar a la velocidad deseada y ser capaz de elevar grandes distancias o posicionar cargas con precisión. También se debe definir si se requiere un control estándar o de radio para mayor facilidad en la operación.
Accesorios de Izaje: Es importante tener en cuenta los accesorios necesarios para operar sin inconvenientes, como eslingas, ganchos, grilletes y vigas.
Si tiene dudas al respecto, con gusto le podemos asesorar y brindar información
La fatiga en los materiales de izaje es la degradación de su capacidad para soportar cargas repetitivas, incluso cuando estas son menores que las que causarían una rotura bajo una carga constante. Este fenómeno provoca la alteración de las propiedades mecánicas del material, reduciendo su resistencia y favoreciendo la aparición de grietas.
La fatiga afecta a los materiales utilizados en izaje, como cables, eslingas y ganchos, y es un problema común en estructuras que soportan cargas dinámicas, como puentes y maquinaria. Para prevenirla, se emplean técnicas de diseño avanzadas, el uso de materiales más resistentes y un monitoreo constante del estado de los equipos.
La abrasión es el desgaste de los materiales debido a la fricción o la acción de partículas duras sobre una superficie más blanda. En los equipos de izaje, como cables de acero y eslingas, la abrasión reduce la vida útil y puede comprometer la seguridad, afectando la capacidad de carga del equipo.
Este desgaste ocurre cuando la fricción entre la carga y el equipo de izaje, o entre las partes del equipo, provoca debilitamiento del material. Para prevenir fallas prematuras, es esencial realizar inspecciones regulares y reemplazar los equipos dañados.
La carga dinámica, como los impactos o tirones, aumenta el riesgo de abrasión al generar fuerzas adicionales sobre el equipo. Además, el ángulo de uso de una eslinga también influye en su capacidad de carga, con ángulos más inclinados reduciendo dicha capacidad y aumentando el riesgo, al igual que daño al equipo
